Escribir sobre literatura es más dificil que escribir sobre cualquier otra cosa, porque la literatura no goza tan plenamente de la abstracción que caracteriza al resto de las artes, y en muchas ocasiones realiza análisis muy profundos de las circunstancias que envuelven al ser humano.
Pero como dije en mi anterior post, mi capacidad de análisis no es la de un crítico, sino la de una admiradora, por cuanto solo escribo sobre lo que me atrae y creo digno de mención, por si algún desprevenido quiere leer alguna vez este blog y puedo indicar algún buen trabajo, si es que eso esta en mi mano.
El Retrato de Dorian Gray ha sido una de esas obras que llega a ti prematuramente, lees y te fascina, pero que va más allá de lo que puedes entender en ese momento, y sin embargo causa tal impresión que al releerla descubres que puede que te haya influido más de lo que has llegado a comprender.